Borrar
Urgente Un hombre cae de una tercera planta en Valencia huyendo de la Policía tras discutir con su pareja
Bernie Sanders y Hillary Clinton, durante el debate.
Hillary Clinton pasa al ataque tras el varapalo de New Hampshire

Hillary Clinton pasa al ataque tras el varapalo de New Hampshire

La exsecretaria de Estado tacha de fantasiosas las propuestas de Bernie Sanders, su rival en la carrera por la nominación demócrata a la Casa Blanca

COLPISA / AFP

Viernes, 12 de febrero 2016, 07:34

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Dos días después de caer derrotada en New Hampshire, Hillary Clinton ha buscado retomar la delantera frente a su rival Bernie Sanders durante el sexto debate de las primarias del Partido Demócrata, denunciando como fantasiosas las propuestas del senador.

Los dos aspirantes se han dirigido directamente a la comunidad negra, un voto clave para los demócratas a medida que la campaña se muda a estados más diversos: Nevada, en el oeste de Estados Unidos celebra un 'caucus' (asamblea electoral) el día 20 y el sureño Carolina del Sur tiene primarias el 27.

"No debemos hacer promesas que no podamos cumplir", ha afirmado Clinton durante el debate en la Universidad de Wisconsin de la ciudad de Milwaukee, difundido por la cadena PBS.

George W. Bush se suma a la campaña de su hermano Jeb

  • Jeb Bush, candidato a la nominación del Partido Republicano, ha anunciado que su hermano y expresidente George W. Bush ayudará la próxima semana en su campaña electoral, en un nuevo esfuerzo para que su candidatura despegue.

  • "Honrado de tener mi hermano a mi lado en la campaña", ha escrito Jeb Bush en un mensaje en Twitter, en referencia a un acto público previsto para la próxima semana en la ciudad de Charleston, en Carolina del Sur.

  • Será la primera vez que el ex presidente participe en los esfuerzos de su hermano Jeb desde que lanzó su campaña en junio del año pasado. George W. Bush es en la actualidad una figura claramente divisiva, tras haber conducido el país durante la invasión a Irak y la severa crisis económica que devastó su imagen en su segundo mandato.

  • La aparición del ex presidente tendrá lugar casi un año después que Jeb, en una referencia al legado de su familia, asegurase en campaña "Yo soy yo, y mis opiniones son definidas por mi propio pensamiento y mis propias experiencias".

  • Desde que dejó la Casa Blanca, en enero de 2009, el expresidente ha mantenido un bajo perfil público, y posiblemente debido a esa ausencia su nivel de aprobación ha mejorado marginalmente. Una encuesta realizada en junio del año pasado por la CNN mostró que el 52% de los estadounidenses tiene una impresión favorable del exmandatario.

  • Carolina del Sur, donde Jeb Bush y los otros cinco aspirantes por el Partido Republicano se medirán en las primarias, posiblemente será un territorio favorable. En la campaña electoral de 2000, George W. Bush ganó las primarias en ese estado con el 53% de los votos.

Los dos aspirantes han coincidido sobre el tema racial, con Clinton denunciando el "racismo sistémico" que pervive en la policía y la justicia, y Sanders lamentando la alta proporción de negros en las cárceles (uno de cada cuatro) como "una de las grandes tragedias" del país. En cambio han chocado sobre el sistema de salud público: Clinton ha criticado el costo exorbitante de la propuesta de Sanders. "He luchado toda mi vida para asegurarme que la cobertura de salud sea un derecho para todas las personas", ha dicho Sanders, quien se define a sí mismo como un "demócrata socialista". "Todos los economistas de izquierda que han analizado eso dicen que los números no cuadran", ha replicado Clinton. "Y esa es una promesa que no se puede cumplir", ha agregado.

Progresismo y pragmatismo

Exsenadora y exsecretaria de Estado del primer mandato de Barack Obama, Clinton intenta convencer a los electores que defiende los mismos objetivos "progresistas" -salud, educación, igualdad salarial- de Sanders, pero que es la única capaz de tomar las medidas pragmáticas para resolver los problemas desde la Casa Blanca.

Pero con un ajustado segundo lugar en Iowa (0,3 puntos por debajo de Clinton) y una abultada victoria por 22 puntos en New Hampshire el martes, ha sido Sanders, quien llama a una "revolución política", el que se ha convertido en el héroe de la juventud demócrata con su denuncia de una "economía amañada".

Hillary Clinton ha tomado este jueves el tema de la economía "amañada", pero ha agregado una dimensión mayor prometiendo "tumbar todas las barreras" que golpean a las minorías, especialmente los negros y los latinos, en asuntos de empleo, vivienda, educación, y sobre todo, justicia y policía. "Nuestra campaña indica que el pueblo estadounidense está cansado de las políticas y la economía del 'establishment'. Quieren una revolución democrática", ha dicho Sanders.

Clinton ha elogiado la presidencia de Barack Obama y se ha presentado como su heredera. En Nevada y Carolina del Sur espera beneficiarse de la coalición de votantes latinos y negros que apoyó a Obama en 2008. Sanders, que requiere alejar el voto afrodescendiente del bando de Clinton, especialmente en Carolina del Sur, donde un 55% de los votantes demócratas son negros, ha entrado en la discusión sobre minorías al proponer reformar el sistema de justicia y acabar con la desproporcionada vigilancia policial de sectores con poblaciones negras. Pero también ha intentado ampliar su base. "Estamos peleando por cada voto que podamos tener, de mujeres, hombres, heterosexuales, gay, negros, latinos y asiáticos", ha señalado el senador de 74 años.

Los congresistas negros, con Clinton

La batalla cuesta arriba del senador se ha manifestado este jueves cuando el grupo de apoyo a la bancada de congresistas negros en la Cámara de Representantes ha ofrecido su rotundo apoyo a Clinton, a quien han descrito no solo como la aspirante con mayor experiencia sino también como alguien que ha abogado durante décadas por los derechos de las minorías.

Pero Clinton debe intentar arruinar el júbilo de Sanders sin alienar a los votantes jóvenes, incluyendo las mujeres, que se inscriben en la retórica anti-Wall Street del senador, a riesgo de que su campaña se desmorone. "No tengo problema con que alguien decida a quién apoyar", ha señalado sobre el voto femenino. "Sólo espero que para el fin de esta campaña haya muchas más que me apoyen a mí", ha añadido.

Sobre el asunto migratorio, Clinton ha defendido las medidas decretadas por Obama para regularizar a niños llevados a EE UU ilegalmente por sus padres, pero ha denunciado el "trato inhumano" de las familias que han sido deportadas en redadas recientes, en ocasiones en medio de la noche. Sanders ha ido más allá promulgando una "vía a la ciudadanía" a los once millones de inmigrantes indocumentados, aunque Clinton le ha reprochado su votó en contra de una reforma similar en 2007.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios